2 de agosto de 2006

Con el rebaño o contra corriente.


Resulta interesante ver la reacción de quien te escucha, cuando dices que eres feliz. Todo el mundo te dice un NO!. Te lo niegan!. Cómo es posible?. Sin embargo si transmites que tu mundo es el más inmenso estercolero de penas y penurias, amargores, depresiones ... o que te agobian tus cientos de hipotecas y tu vecina de abajo... ZAS! palmadita, sonrisa, aceptación, carnet del "club de tiro al pichón" y, sobre todo, "mira qué buena chica (está peor que yo)". Claro que yo prefiero ser esa rara que hasta pagando su única hipoteca es inmensamente feliz. (aunque el carnet del club de tiro al pichón es goloso, eh!).
Sé que quien niega que la felicidad exista es que jamás la ha sentido (no quiere) y por eso lo hace. Cada uno mide en función de lo que sabe medir... o hasta ahí a donde llega.
Como dijo alguien: "El árbol bien cultivado se conoce por sus frutos... y el corazón del hombre por la expresión de sus pensamientos".
Debe de ser que la negación es el argumento favorito de la ignorancia (o tal vez su único argumento).
El día que yo vea que una oveja se decide a salir del rebaño y darse un clareo en solitario sin miedo a perderse... la adopto!
Periscopio arriba.